I hate goodbyes

De repente llega el momento de irse, llega sin que nos demos cuenta, así sin más tienes que despedirte y quizá sea un adiós para siempre. 


Se van, ellos que fueron mis amigos desde que llegué a Australia, los que día a día me animaban, los que me hacían sentirme a gusto...

Que voy a echar de menos sus retrasos diarios, sus 'piesito' 'brasito' y 'teresita'.Que las clases no van a ser lo mismo sin que el me pinte las piernas me saque la lengua o me guiñe un ojo. Si no van a estar para invitarme a todas las fiestas, si no le voy a volver a ver su cara de resaca el viernes por la mañana, ya no voy a tener a nadie que me tire el café por encima o que pinte las paredes con los lanzamientos de chocolate de 2 dólares de la máquina del colegio. Ya no voy a poder cotillear sobre lo que paso la noche anterior y nadie me va a dar los mejores consejos. Si ella no va a estar para cuidarme y decirme 'take it easy' , y no se con quién voy a ir de compras en el 'self access' o con quién me voy a reir tantísimo. Que voy a echarles muchísimo de menos, que nunca pensé que llegaran a ser tan importantes para mí. Porque ya es el último día con ellos, que quiero volver a abrazarles y a decirles que los quiero, que espero volver a verles pronto, que han sido super importantes para mí, que han llenado mis días, que me lo he pasado genial con ellos, que se me caen las lágrimas solo de pensar que sea la última vez. No puedo creerme que se vallan, que no esten mi última semana, que no esten para tirarme de las orejas y verme cumplir esos 19 años que tanto esperaban, que nadie como ellos me hace sentir tan bien, que me han encantado cada pequeño momento juntos, que he reído muchísimo con ellos. Que quiero volverles a ver muy pronto y que no les voy a olvidar NUNCA.

I'll miss you so much..

Good day for surf

Siete y cuarto de la mañana suena la alarma, estiras el brazo alcanzas el ipod y abres un ojo  arrastras el dedo y piensas 10 minutos más y me levanto. Te dejas caer sobre la almohada y sueño instantáneo. De repente esa sensación de, me he quedado dormido.Te levantas sobresaltada corres a la ducha y el agua helada cae sobre tu cara ya puedes comenzar a ver con claridad. Ya esta bajando la inflamación de los ojos.


Desayunas tu leche con cereales agarras la carpeta y corriendo a clase. Un día más en el que ves como día a día puedes mantener una conversación mas coherente. Aprendes nuevas cosas, pero la ultima hora después del 'lunch' ya se te están cayendo los ojos y tienes la impresión de que son las 6 de la tarde y no son ni las 2.30 todavía.


Acaba la clase corres a casa te metes dentro del neopreno agarras tu tabla y así descalza te bajas a la playa, el está ahí esperándote para enseñarte como debes coger la ola y lo rápido que debes bracear en cada momento, te empuja la tabla y te sonríe. Te grita ''come on'' ríe cada ve que te mira y ve como una ola enorme se te esta viniendo encima. El aprende contigo, reís y os miráis del dolor de brazos que tenéis de intentar luchar contra esas olas tan altas. Sientes como el mar te arrastra como la corriente te lleva hacia las rocas. Coges impulso te tumbas y braceas escalas ola tras ola hasta que ves ahí a lo lejos la ola que te va ha llevar hasta la orilla giras la tabla y mueves tus brazos ya en el mismo sentido con mucha fuera oyes como esta tan cerca y de repente ya estas encima das un pequeño impulso con los brazos y en menos de un segundo te has colocado de pie en la tabla y mantienes la estabilidad hasta que la quilla se clava en la arena. Corres de nuevo al agua braceas sin parar no piensas en nada más que en como coger la siguiente ola, o como levantar la tabla para atravesar eso tan grande que se te está viniendo encima. A veces buceas la ola, otras intentas saltarla. Miras como surfistas a los dos lados dominan el mar de una manera increíble y sueñas en poder algún día surfear como ellos. Entonces coges con el doble de ganas la ola. Ya es la última porque ya hace horas que estáis en el agua y os sabe la boca como si os hubierais comido toneladas de pipas con sal. Pero si no fuera porque ya está oscureciendo nos quedaríamos 3 horas más. 


Me encanta la sensación de salir del agua quitarte el invento del pie derecho, amarrarlo a la parte de atrás de la tabla y juntos subir hacia el asfalto dejando el mar detrás. Me gusta cuando llego a casa y me meto en la ducha con agua fría y me quito el traje lleno de arena de la de vueltas que me ha dado el mar hoy.

Te invade la sensación de satisfacción a la par que el cansancio y solo tienes ganas de meterte en la cama y vivir otro día increíble como el anterior.

Todos los secretos sobre sus LOCURAS.

Rebobinamos, tocamos una y otra  y otra vez el botón. Analizamos segundo a segundo cada mínimo detalle. Encendemos la música y la ponemos a todo volumen para evitarnos oír nuestros propios pensamientos. 


Y toda esa cantidad interminable de canciones, en las que cada acorde revive un sentimiento diferente y totalmente incontrolable. Nos recuerdan todo aquello, que aún no se ha ido, que sigue vigente y seguirá presente hasta que vuelva y no te pese mirarle. Hasta que sientas que tu corazón ha podido perdonarlo.




Todos vivimos historias, grandes momentos que marcarán nuestra vida o que la marcaron en algún momento. Y consiste en coger lo mejor de cada momento y no pensar por qué se acabó, o por qué motivo ya no esta para sonreírte día a día. 


De repente algo se acciona, y ya no queda nada. Se evapora, como si nunca hubiera existido como si todas esas lágrimas que un día derramaste nunca hubieran sido reales. Que todo eso que sentías en esos días se perdió sin más. Y todas esas sonrisas y momentos ahí se quedaron para siempre


No vale la pena pasarse horas reviviendo sentimientos que nos hacen sentir que estamos solos porque el se fue. Porque en realidad SÍ, estuvo ahí.
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Y si le echas de menos es porque realmente en algún momento todo eso que extrañas fue real. Sería mucho más horrible no haberlo vivido nunca.

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STANDBY.

Me da vértigo el punto muerto y la marcha atrás, vivir en los atascos, los frenos automáticos y el olor a gasoil.

Me angustia el cruce de miradas, la doble dirección de las palabras y el obsceno guiar de los semáforos. Me arruinan las prisas y las faltas de estilo, el paso obligatorio, las tardes de domingo y hasta la línea recta. Me enervan los que no tienen dudas y aquellos que se aferran a sus ideales sobre los de cualquiera. Me cansa tanto trafico y tanto sinsentido. Parado frente al mar mientras el mundo gira.

Busca otro mundo, vive.

Rabia, impotencia, dolor, angustia, odio, ganas de gritar, de no parar de llorar.

Y Me quedo sin aire, cuando te pienso, cuando siento que ya no estas, cuando se que solo cuando lo pierdo me doy cuenta de las cosas. Cuando solo me salen las palabras para describir lo mal que me siento, cuando he perdido la sonrisa, cuando las calles se vuelven largas y las noches eternas, cuando me noto incapaz de sobrevivir un día más, cuando nada es suficiente para cambiarlo todo. Cuando ya las lágrimas corren por mis mejillas y los rollos de papel higiénico inundan mi habitación. Cuando me veo incapaz de encontrar soluciones y todo se convierte en un laberinto del que no puedo salir. Cuando empiezo a conformarme con sobrevivir y tu presencia es tan efímera que me abruma la sensación de levantarme de la cama cada mañana. Cuando empieza a dar igual un lunes que un sábado porque ya todos saben a mañana de domingo con resaca, cuando mi estado de ánimo comienza a estar bajo mínimos y mis fuerzas se empiezan a sobrevalorar cuando la soledad se vuelve tan presente que no deja de recordarme que el que esta solo es porque quiere. Pero es que ya me dan igual las horas que falten, las que he perdido, los días soleados o lluviosos si ahora solo hay niebla si ya no importan los litros de alcohol en sangre ni el sabor a tabaco en la boca, si da igual que la música este alta, tanto que preferiría que me rompiera los tímpanos para no escuchar toda esa sarta de canciones sin sentido que me recuerdan lo que me gustaba.  Porque me dan igual los besos las caricias y las ganas de estar juntos, Porque sobran todas esas palabras que me dijiste y te dije porque ahora solo sirven para que la cama cada día sea más grande y los días más largos y fríos.Tanto que siento que me caigo que necesito estar ocupada las 24 horas del día que con un segundo me basta para pensarlo y recordar toda esa mierda que me hace estar horas frente a un folio en el que no paran de caer gotas que hacen que se me corra la tinta . Te odio y odio ese te quiero y no lo olvides o ese me encantas o eso de que hacía mucho tiempo que  no sentías algo así, porque duelen cada vez que resuenan en mi cabeza desearía olvidarlo todo y poder estar en esa misma perspectiva en la que estas tu donde todo es TOTALMENTE INDIFERENTE.

Los imposibles también existen.

Te paras a repostar, un descanso de cinco minutos, una vista al horizonte, un recuerdo lejano. Y te das cuenta de que hace mucho tiempo que perdiste el norte, que llevas viajando sin mapa toda la vida y que nunca te ha ido demasiado mal. Que quizás los caminos estén para no seguirlos y las piedras para tropezarse. Que el paraguas muchas veces evita que nos mojemos y que demasiados rayos de luz nos puedan cegar. Que quizás todas esas reglas y esas pautas que debemos seguir para ser felices son solo patrañas. Cada uno encuentra la felicidad en el acto más banal elegido por nuestro corazón. Quizás solo tengamos que pisar el acelerador de vez en cuando para evadirnos un poco y dejar que todo siga su curso.

Hace tiempo.

Todas esas pequeñas piezas de la máquina están en constante funcionamiento, asegurándose de que estés exactamente donde debes estar, exactamente cuando debes estar ahí, en el lugar adecuado y en el momento adecuado.

Never is an awful long time.

Las cosas suceden, muchas veces no sabemos explicarnos el porqué.

De repente un día estas solo y al día siguiente tienes a alguien ahí, contagiándote minuto a minuto su sonrisa. 

Tan pronto como el se va aparece el miedo, empieza una nueva sucesión de problemas, de indecisiones y vuelve con ello la tristeza, los días llenos de nubarrones negros.

Y buscas los por qués, necesitas soluciones, respuestas, algo que alivie ese dolor quizá por que sientes que lo perdiste. Que ya no está, que no sigue ahí que se ha ido quizá lejos y no sabes si algún día volverá..

Consiste en no pensar, en no buscar las soluciones, ni las causas. Quizá tenga que ser así.

Sí, puede que sea muchísimo tiempo. 

Y los días se hacen cuesta arriba, y pienso constantemente en si hice bien.

Pienso en la distancia día a día,en el tiempo, en como pasan las horas, pienso como sería todo allí, que haríamos cada día.

Y a lo mejor nunca sabré si cometí un error, y se me escapó de entre las manos, que no se como sostenerlo desde aquí. Porque no veo si sonríes, si hoy tienes un buen día o si necesitas un abrazo. Que no estoy para contarte que hoy estoy triste por cosas totalmente irrelevantes, ni para hacerte reír con mis tonterías. 

Que no estaré para cantar las canciones juntos, ni para regalarte algo el día 13. Que no voy a poder decirte a la cara ''Hasta mañana guapo''. 

Que no estoy ahí para sentarme a tu lado y que me enseñes a meter segunda.Que solo se que quiero llegar allí y ver que todo es como antes, que vamos a seguir como siempre.

Y te echo de menos.

''La vida es menos puta si estas a mi lado''.

Y no amanecerá hasta que no ilumines la función.

Y así de un día para otro, todos mis planes cambian. De repente me queda una semana para volverme a España. Y basta con una llamada para que falte un mes exactamente para regresar.
Y no se si me vienen grandes tantos días, no se si hubiera sido mejor volverme, lo que esta claro es que ya no hay vuelta atrás, que me quedó un mes más lejos de casa.


Quizá no me lo haya tomado con mucho entusiasmo, quizá no tenga una emoción desbordante por quedarme, es normal  supongo que ya había hecho la cuenta atrás y había programado mil y  una cosas que hacer cuando llegara. Había imaginado tantas veces ese día en el aeropuerto, mi llegada a zamora, como sería el abrazo de mis padres y la cara de mi hermano. Como serían mis días hasta el 26 de septiembre que ahora pues, parece que nada me hace tanta ilusión. Me gusta esto, mucho, muchísimo y quiero seguir disfrutandolo, pero no puedo evitar pensar lo que dejo allí. Lo que hace un mes que he dejado, que hoy hace exactamente un mes que llegué aquí.


8 de Agosto de 2011 hasta el 7 de Septeimbre de 2011. La gente que ha cambiado por completo su vida y vive aquí me dicen que de que me quejo. Pues sí me quejo, porque si cada uno de vosotros estuviera en mi lugar se plantearía lo mismo que yo. 
Esta claro que hay cosas que siempre van ha estar ahí, mi familia, los amigos de verdad siempre seguirán ahi. Pero hay cosas, gente que el tiempo puede hacer que desaparecan, que se pierdan, que olviden...
Si desaparecen se suele decir que no merecían la pena, que no les importaría demasiado, pero no quería arriesgarme a pederlos.


Con él estaba el día que mi padre me propuso quedarme aquí este verano, ese día parecía que sería mucho tiempo, pero quedaba tan lejano que ninguno de los dos eramos conscientes. Ya hace más de un mes que no le veo, y ahora el tiempo ya no pasa tan rápido como antes.

Y hay días y días, montones de momentos en los que querría cambiarlo todo y cogerme el primer avión para España. Pero supongo que oportunidades como esta solo pasan una ve en la vida y muchísima gente querría estar en mi lugar. Pero la vida aquí es tan distinta, es tan envidiable que no sé.. 


Quizá me preocupo por tonterías y debería solo centrarme en disfrutar. Si algo me echa para atrás es la cantidad de tiempo que voy a pasar sin verle.

 te extraño. 

Pacific Ocean.

Mañana de sábado en medio del océano pacífico. Ahí, entre las olas que se nos venían encima, las tablas por el agua, remando todo lo rápido posible y coges la primera ola y te invade esa sensación de ser el ser más feliz del planeta. Cambias la posición, das un pequeño salto y te colocas encima de esa tabla, en la cresta de la ola y durante al menos 5 segundos sientes que puedes conseguir todo lo que te propongas.
Arena, mar, neopreno y una tabla que pesa más que tu mismo.

Y son esas pequeñas cosas, esas facciones de segundo, esos pequeños momentos en los que te das cuenta que cada día que pasa vale muchísimo.

M A N L Y.

Probablemente sean pocos días,  quizá nunca vaya a ser suficiente porque querría más y más días. Querría más partidos de volley, más barbacoas en Shelly beach, me gustaría ir todos los días a clase con ellos. Siempre encontraría un motivo para quedarme un poco más, para no irme, y no quiero irme.

Me gusta levantarme a las siete y media de la mañana para pasar la mañana entera con ellos, me gusta como son como cada uno de ellos son únicos e irrepetibles.

Como me río con ellos, como intentan pronunciar las pocas palabras que les digo en Español, como me cuidan y estar siempre pendiente de mi. Como no me dejan sola ni un momento.Como me abrazan o me revuelven el pelo.Como con esa sonrisa te saludan. Son maravillosos.

Que ya son dos semanas con ellos y se me han pasado rapidísimo. 

What time is it where you are?

Sábado, sábado en el frío de Australia, en una casa en la que cada mañana al despertar veo el mar, veo como la gente lleva despierta horas y yo todavía me quito las legañas de los ojos, veo como mi prima todavía podría quedarse otras nueve horas más tapada hasta la nariz con el nórdico. Veo como la gente descalza va por la calle con su traje de neopreno y su tabla en la mano y se disponen a surfear las olas en las primeras horas del día. Me doy cuenta de que las horas que yo paso en la cama no solo son consecuencia de un jet lag en toda regla si no de que me cuesta afrontar un día más tan lejísimos de mi vida en España. Enciendo mi ipod y escucho nuestras canciones, de pronto comienza la sucesión de recuerdos en mi cabeza, imágenes, frases, momentos.. Paro durante al menos 15 minutos de mi tiempo para pensar totalmente en ti. Despierto y desayuno estas tostadas de mantequilla solo hechas por un lado, bebo el mítico zumo de Coles y mi leche con nesquik. Ayudo a mi prima a meter el queso en el microondas que por muchos días que pasen seguirá sin saber como funciona. Y entro en la ducha en esa que la espuma del jabón sale por la rendija del suelo del baño, ahora ya el agua esta caliente. Cojo mi toalla naranja y corro hacía la habitación a vestirme. Y comienza el día, otro día más que no tiene nada que ver al anterior, ni a todos los otros que he vivido. Aquí mientras yo me he levantado allí vosotros todavía dormís estáis en un sueño profundo y yo aquí mirando dos horas diferentes cada vez que necesito saber la hora. Y pienso si aquí son las 10 de la mañana para ellos son las 3 de la mañana, les queda toda la noche por delante y a mí todo un día. Y también dices, que frío tengo y el calor que pasaba yo en España. Y siguen pasando las horas, todo el día pendientes de en que momento podremos establecer un pequeño contacto con España.

Y ahora das un salto, de repente el tiempo pasa sin que nos demos cuenta, ha pasado ya casi un mes desde que llegamos aquí.

Ahora los días comienzan a las 6 de la mañana, esta mañana al salir a la calle olía el mar mientras la vecina sacaba el correo y me pedía amablemente que le sujetara al perro. Son y cuarto, cinco minutos más y llego tarde. Avanzo deprisa dejando la gente desayunando a mi izquiera. Llego y a clase inmersa en un mundo completamente distinto, disfruto, sonrio y aprendo cada día algo nuevo. Me gusta Australia, me gusta ver los coches conducir por la izquierda, me gusta levantarme y ver el mar, me encanta poder salir en invierno a la calle con una simple sudadera, me gustan las tardes de volley playa y me gustan mis compañeros de clase. Me encanta ver a mi prima levantarse por las mañanas y despedirla desde la cama con un ''que tengas un buen día'', me ilusiona cuando vibra mi móvil porque se que es ella para contarme que se ha cruzado con un chico guapísimo en el autobús o que el destino le ha dado una señal moviendo las hojas de una revista. Me gusta verla sonreir cuando llega del colegio y me cuenta todo sobre su nueva vida. Me encanta ver como mi tio llega a casa reventado porque se ha levantado a las 4 de la mañana para coger un avión, pero eso se le queda pequeño cuando se da cuenta de que nuestra chica rebelde se ha levantado sola a las seis de la mañana.Me gusta hacer la compra en coles por supuesto, me gusta bañarme en este mar aunque el agua corte la circulación. Y sobre todo me encanta sentirme parte de esta nueva vida que ellos empiezan aqui.