Quotes

"Cuando sepas de mí, tú calla y sonríe, jamás preguntes qué tal. Si me fue mal, ya se ocuparán de que te llegue. Y con todo lujo de detalles. Ya verás. Poco a poco, irán naufragando restos de mi historia contra la orilla de tu nueva vida, pedazos de recuerdos varados en la única playa del mundo sobre la que ya nunca más saldrá el sol. Y si me fue bien, tampoco tardarás mucho en enterarte, no te preocupes. Intentarán ensombrecer tu alegría echando mis supuestos éxitos como alcohol para tus heridas, y no dudarán en arrojártelo a quemarropa. Pero de nuevo te vendrá todo como a destiempo, inconexo y mal.

Qué sabrán ellos de tu alegría. Yo, que la he tenido entre mis manos y que la pude tutear como quien tutea a la felicidad, quizás. Pero ellos... nah.

Por eso, cuando sepas de mí, no seas tonta y disimula.
Haz ver que me olvidas.
Y me acabarás olvidando.
De verdad."



"Me gustan los refranes, porque el que la sigue la consigue, y el que algo quiere, algo le cuesta. Porque nunca es tarde si la dicha es buena, y si la palabra es plata, el silencio es oro. Porque quien espera, desespera, y aunque la mona se vista de seda, mona se queda. Me gustan los dichos. Las locuras. Me gustan las frases vacías. Las canciones que lo dicen todo y las que parece que no dicen nada. Los silencios. Los gritos."



"Me gusta conocer gente nueva. Me gustan las tardes tomando cañas con ellas. Me gustan las noches de desenfreno y las mañanas de ibuprofeno. Me gustan las tardes de relax y las tardes de mil planes. Me gustan los viajes sin planear. Los cafés de las tres que se alargan hasta las ocho. Me gusta soñar. Soñarte. Suéñame."

" Tenemos la mala costumbre de dejar para luego, de reír poco y de querer hacerlo mañana. Tenemos la mala costumbre de echar de menos, en lugar de hacerlo de más. La mala costumbre de usar los luegos y no los ahoras. Luego te llamo, luego te escribo, luego te contesto, luego nos vemos. Y obviamente nunca llamó, nunca escribió, nunca contestó y nunca fue visto. Tenemos la mala costumbre de querer tarde. De valorar tarde. De pedir perdón demasiado pronto.
Tenemos la mala costumbre de empezar el gimnasio la semana que viene. De cuidarnos cuando ya es demasiado tarde y de tomar vitaminas cuando estamos enfermos. Tenemos la mala costumbre de creer que el pelo de aquella es mejor que el nuestro. Que su suerte es nuestra desdicha y de compararnos como si fuésemos presa de alguien que busca en comparadores de Internet. Tenemos la mala costumbre de medirnos por nuestros estudios o por nuestra altura. De confundir la belleza con la delgadez y de creernos que no somos capaces de conseguirlo, porque alguien una vez así, nos lo hizo creer. Y no fue nadie más que tú mismo."


"Espero que te digan adiós. Y que lo digas tú también, queriendo y sin querer.
Espero que te equivoques tantas veces como puedas. Que puedas pedir perdón por ello otras tantas. Que te perdonen. Que siempre vuelvas a casa con una lección aprendida y la paz de quien sabe que el orgullo destruye más que crea y aleja más que acerca. Que te acerques. Que merezca la pena.
Espero que te rompan el corazón. En trozos muy pequeños. Tan pequeños que ni siquiera parezcan trozos. Tan pequeños que se confundan con el polvo. Espero que te agaches. Que los recojas. Que los vuelvas a encajar en lugares que jamás imaginaste que existirían dentro de ti. Espero que te sacudas las telarañas y los tengas donde hay que tenerlos para volver a hacer eso que todos necesitamos hacer tarde o temprano, confiar.
Espero que vivas.
Que sobrevivas.
Y que merezca la pena."


"Pero hay cosas a las que no te acostumbras ni con todo el tiempo del mundo. No te acostumbras al hueco del otro lado de la cama. Nunca te acostumbrarás a no ver su sonrisa, o a dejar de pedir dos copas en un bar, o a comprar dos entradas para un concierto. A no notar su olor, ni sus besos; ni a que se te reviente el alma cada vez que te mires en el espejo y te das cuenta de que eres el gilipollas más grande del mundo por haber dejado escapar al amor de tu vida."


"Lo que duele no es el dolor. El dolor es sólo una consecuencia. El efecto secundario de algo que nos hizo sufrir y que todavía hoy sigue haciéndolo. Me gustaría que esto que tanto duele fuese lo que me aplasta el pecho y me araña las vísceras y el corazón. Esto que se puede paliar poco a poco, con consejos, amigos, medicamentos, horas, sobremesas y tazas de café. Pero algo me dice que no. Que lo que duele no es el dolor.
Lo que duele no es el dolor. Lo que duele es la ausencia. El hueco que deja alguien que ya no está. Echar de menos con contrato indefinido. "



"Y así no es de extrañar que haya gente que se quiera tan flojo. Nos enamoramos y hacemos ver que nos da igual. Vayamos poquito a poco, no te vaya a soltar un te quiero demasiado pronto, no nos vayamos a precipitar. Como si esto que te sale del corazón fuese agua del grifo. Ahora lo caliento, ahora lo enfrío. Ahora le doy a chorro. Ahora gotita a gotita y no más. Y el día menos pensado se te olvida quitar la llave de paso y te encuentras flotando empapado en medio de tu propia soledad."

"Os invito a mirar en las mentes que encuentran en la adversidad una manera de hacerse más fuertes, las que van de frente porque los perfiles sólo muestran la mitad, las que hacen que no puedas consumirlas de manera responsable, las que han comprendido que la vida es tan corta que si no haces lo que quieres al final es como si no hubieses hecho nada."

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